El IVA que propone Bruselas para España, toda la información

El IVA que propone Bruselas para España, toda la información
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La Comisión Europea (CE) ha publicado un informe sobre España en el que alerta de que "Siguen siendo altos los riesgos para la sostenibilidad de las finanzas públicas a medio plazo". Esto se debe porque da ratio de deuda de las Administraciones Públicas españolas se mantiene elevada, en un nivel ligeramente por debajo al 100 % del PIB en 2016 y lo peor de todo... Se espera que la ratio de deuda pública siga aumentando a medio plazo.

En referencia al déficit, en 2015, el déficit fue del 5,1 % del PIB y la estimación provisional del 2016 es que se situé en el 4,7% lo que implica una décima más del acordado y pone en riesgo de incumplimiento del 3,5% para este año y del 2,9% para 2018.

Desde 2014, el bajo ritmo de reducción del déficit ha dependido en gran medida de las favorables perspectivas macroeconómicas y la mejora de las condiciones financieras.

Uno de los problemas que identifica la CE es que el ajuste presupuestario no está suficientemente respaldado por los impuestos sobre el consumo, debido principalmente a una amplia brecha en cuanto a la política en materia de IVA y esto sucede a pesar de que el tipo general del IVA español en el 21% está en consonancia con la mediana de la UE.

Según la CE, ¿Cuál es el problema de nuestro IVA?

España soporta unos ingresos por IVA relativamente bajos frente a la recaudación total. La recaudación del IVA es del 6,5% sobre el PIB, mientras que el porcentaje de recaudación medio europeo se sitúa en un 7%. Esto se debe principalmente a que España aplica frecuentemente exenciones o tipos reducidos sobre algunos bienes y servicios.

Cabe recordar que España aplica un tipo superreducido de IVA, del 4 %, en particular, a los productos alimenticios, los productos farmacéuticos, algunos equipamientos médicos, algunos libros y periódicos, y viviendas sociales, y un tipo reducido, del 10 %, a, en particular, el transporte dentro del país, hoteles, comidas para llevar, bares y cafés, insumos agrarios, tratamiento de residuos y de aguas residuales y recogida de residuos domésticos.

alimentos

Según la CE, tenemos por lo tanto una alta brecha en cuanto a la política en materia de IVA. Es decir, unos ingresos potencialmente no percibidos por aplicar tipos específicos a algunos bienes y servicios y que podrían recaudarse si todos se gravaran al tipo normal (asumiendo el pleno cumplimiento de las obligaciones tributarias).

Pues bien la brecha de España sobre el IVA es del 59 %, frente a una media de la UE de aproximadamente el 44 %, siendo la más alta de toda la UE. Bajo este análisis se plantea cómo podrían afectar sobre la recaudación, diferentes modificaciones en los tipos de gravamen del IVA.

Diferentes simulaciones sobre cómo afectaría un aumento de tipos de gravamen en el IVA

Las simulaciones que ha efectuado el Centro Común de Investigación de la Comisión Europea muestran que la reducción de la brecha en cuanto a la política en materia de IVA aumentaría los ingresos entre un 0,2 % y un 1,4 % del PIB, en función del ámbito de aplicación y la amplitud de la reducción.

En la siguiente tabla se presentan los efectos fiscales y distributivos de los cuatro escenarios de reforma de la estructura de tipos del IVA español, que reducirían la insuficiencia de la política en materia de IVA, siendo la referencia el escenario actual de tipo superreducido del 4%, del reducido del 10% y el general en el 21%.

Tipos

En el primer escenario con un tipo reducido del 10%, del superreducido en el 10% y del general en el 21%, se estima que el incremento de los ingresos públicos como porcentaje del PIB sería de un 0,2%.

En el segundo escenario se valora que con un tipo reducido del 8%, del superreducido en el 14% y del tipo de gravamen general en el 21%, el aumento de los ingresos públicos como porcentaje del PIB sería de un 0,5%.

En un tercer escenario, con un tipo reducido del 12%, del superreducido en el 12% y del general en el 21%, el pronóstico obtenido es que el incremento de los ingresos públicos como porcentaje del PIB sería de un 0,4%.

En el cuarto y último escenario, se evalúa que en un supuesto de que no hubiera diferencias de tipos de gravamen sobre el IVA, lo que implicaría un tipo general del 21% para todos los bienes y servicios, la valoración es que el el aumento de los ingresos públicos como porcentaje del PIB llegaría a ser del 1,4%.

No obstante, se valora que aparecerían posibles efectos negativos sobre la distribución de la renta que podrían reducirse mediante una mayor prioridad a artículos sin efectos regresivos o con pequeños efectos regresivos, o bien que existiera una compensación por otros medios, por ejemplo mediante transferencias sociales.

Las diferentes reforma sobre el IVA durante la crisis

Al inicio de la crisis una de las reformas en más importantes en materia impositiva fue la subida del IVA cuyo objetivo no era otro que llenar las arcas públicas ante la debacle de los ingresos tras el pinchazo de la burbuja inmobiliaria.

Si bien desde el año 1995 los españoles asumían un tipo de gravamen general sobre los bienes y servicios del 16%, un reducido del 7% y un superreducido del 3%, tras la reforma implantada en julio de 2010, el tipo general subió hasta el 18%, el reducido al 8% y el superreducido al 4%.

Esto permitió al Gobierno recaudar más por IVA... Si en 2009 la recaudación por IVA fue de 33.573,6 millones de euros, en el año 2010 ascendió hasta 49.079 millones de euros, un 46,18% más frente al año anterior.

Esto no acabo aquí, el memorando de entendimiento firmado el 20 de julio de 2012 para el rescate del sistema financiero español, se incluía lo siguiente en el punto 31:

"En cuanto a las reformas estructurales, las autoridades españolas se han comprometido a llevar a efecto las recomendaciones específicas para España en el contexto del Semestre Europeo. Estas reformas tienen por objeto corregir los desequilibrios macroeconómicos detectados en la revisión en profundidad realizada conforme al Procedimiento de Desequilibrio Macroeconómico. En concreto, se recomienda que España: Introduzca un sistema tributario acorde con los esfuerzos de consolidación fiscal y más propicio para el crecimiento".

Entre las reformas estructurales se encontraba darle una vuelta de tuerca más al IVA y en septiembre de 2012 se impuso un tipo general del 21%, un tipo reducido del 10% y el tipo superreducido se mantuvo en el 4%.

Con toda esta modificación en los diferentes tipos de gravamen, los ingresos por IVA han aumentado en los últimos años desde el mínimo del 3,9% del PIB que se registró en 2009 hasta el 6,5% de 2015.

La especial preocupación por la deuda pública española

España se une a Alemania, Irlanda, los Países Bajos, Eslovenia y Suecia como países que según el análisis de la Comisión Europea (CE) presentan desequilibrios que deben ser corregidos. Sin embargo puntualizar que la CE diferencia estos países frente a Bulgaria, Francia, Croacia, Italia, Portugal y Chipre valorando que éstos están experimentando desequilibrios económicos excesivos.

Se ha simulado la trayectoria de la deuda pública en base a diferentes escenarios posibles. En el escenario de referencia, se prevé que la deuda de las Administraciones Públicas aumente a lo largo del periodo de la previsión hasta alcanzar alrededor del 107,8 % del PIB en 2027, lo que supone un riesgo frente a shocks externos.

Deuda

El aumento de alrededor de ocho puntos porcentuales durante un periodo de proyección de 10 años vendría impulsado por la persistencia de un déficit primario durante todo el periodo de proyección y por un diferencial tipo de interés–crecimiento que sería creciente.

Con las hipótesis de crecimiento real más favorables llevarían a la ratio de deuda a seguir una senda inferior, hasta alcanzar el 102,2 % del PIB en 2027. En cambio, con unas hipótesis más desfavorables sobre el crecimiento del PIB real o los tipos de interés, la ratio de deuda aumentaría, respectivamente, al 113,7 % o el 117,8 % del PIB en 2027.

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