El sector bancario se encuentra en pleno proceso de reestructuración y saneamiento, intentando mejorar ‘a toda costa’ su ratio de eficiencia, incluso prescindiendo de una gran cantidad de trabajadores. Al menos así es la ‘moda’ que se está gestando en el Reino Unido, que de trasladarse a España, puede incrementar notablemente la tasa de desempleo.
Este escenario resulta cuanto menos curioso, cuando muchas entidades han incrementado generosamente la retribución de sus cúpulas directivas, y que de manera contradictoria aplauden que la solución tiene que venir necesariamente por el adelgazamiento de la fuerza laboral.
La ‘moda’ que les acabo de comentar resulta cuanto menos incoherente, puesto que si tratamos de reducir los costes laborales, no es nada lógico que se prescindan de los que menos ganan, abriendo la brecha entre mercados de trabajo de primera y segunda categoría.
Los bancos son entidades privadas, y como tales, tienen el derecho de ‘decidir’ qué es lo que más les interesa en cada momento, pero en mi opinión, resulta totalmente desacertado transmitir al mercado la necesidad de reducir personal para contener los gastos en la cuenta de pérdidas y ganancias, cuando al mismo tiempo se mejoran las condiciones económicas de los ‘más afortunados’. ¿Estamos ante un proceso de ajuste? ¿O tal vez es un intento enmascarado de restar igualdad de oportunidades en el sector bancario? Máxime cuando se trata de un sector que genera grandes beneficios.
Vía | Expansión
En El Blog Salmón | La sangría laboral en las cajas de ahorro se cifra ya en 10.000 empleos
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