Para los que tienen que dar discursos, normalmente no se pueden escapar los nervios. Para mitigar esto, vale la experiencia y la preparación.
No hay mejor confianza que la que te da conocer bien tu tema y tener bien preparado el discurso.
Para la preparación hay cosas que se pueden hacer y esta lista nos da algunas:
Empieza pequeño, es decir, con audiencias pequeñas.
Cree en tu audiencia.
Respeta a tu audiencia, es decir, estar bien preparado.
Prepara diciendo tu discurso en voz alta.
Practica copiando la misma situación.
Practica con presencia de alguien y recibe opiniones honestas.
El que no dicen es el de dar muchos discursos, ya que no hay nada mejor que la experiencia y con cada uno se mejora.
Vía | Business Week (en inglés) En El Blog Salmón | Diez recomendaciones para un buen discurso