La apuesta por el Mercado Único de Capitales para resolver la bancarización de Europa

La economía europea se caracteriza específicamente por una excesiva representación de la banca para la financiación de las empresas. El dato más relevante para identificar el gran peso que ostenta hoy en día la banca es que los activos bancarios representan el 350% del PIB de la Unión Europea. Además, el mercado de bonos corporativos que representa sólo una décima parte del PIB de la Eurozona.

La dependencia de Europa de la financiación bancaria ha disminuido durante la última década, pero sigue siendo casi el doble que en los Estados Unidos.

El sector no bancario sigue creciendo. Desempeña un papel cada vez más importante a la hora de proporcionar una fuente estable de financiación a la economía europea. La financiación de las empresas de la Eurozona a través de valores distintos de acciones y préstamos no bancarios ha aumentado del 24% al 36% en los últimos diez años.

En este período, las emisiones de acciones de las empresas han pasado del 8% al 10% del PIB. Además, en cuanto a la financiación mediante acciones, las acciones cotizadas emitidas por empresas no financieras han pasado del 36% del PIB en 2014 al 41% en 2018. La capitalización bursátil total de las empresas que cotizan en bolsa en la UE se sitúa actualmente por encima de los niveles anteriores a la crisis.

Desde hace unos años, la Unión Europea está trabajando para la creación del Mercado Único de Capitales con el fin de dar mayores opciones de financiación a las empresas.

Los problemas de la financiación bancaria

Que depengamos tanto de la financiación bancaria tiene sus riesgos, lo vimos, de manera clara, la crisis financiera y de deuda soberana que se inició hace más de una década.

Mientras que la banca se veía obligada a encoger sus balances y redefinir la estructura de riesgo, tenía un gran impacto en la economía, retrasando la recuperación tanto de la inversión como del crecimiento económico.

No fue casualidad que aquellos países de la Eurozona más expuestos a la financiación bancaria a las empresas, como es el caso de Grecia, Irlanda, Italia, España y Portugal fueron aquellos países más afectados por la crisis y lo que nos demuestra la importancia de tener una fuente de financiación plenamente diversificada.

Por ello, se hace necesaria la creación de un mercado que permita a las empresas acceder a nuevas modalidades de financiación más allá de la bancaria ya que supone un serio riesgo, en los supuestos de crisis bancaria o económica que restringen el flujo de liquidez a las empresas.

La solución: El Mercado Único de Capitales

la Comisión Europea tiene como objetivo prioritario la creación del Mercado Único de Capitales para facilitar las necesidades de financiación de las empresas, a través de la integración de los 27 mercados de capitales ya existentes en los países miembros.

Fue concebido por primera vez en el marco del Plan de Inversiones Junker presentado en 2015, y desde entonces ha tratado de crear un mercado de capitales común para Europa. En principio, antes de finalizar el año se debía implantar el mercado único la Unión Europea, no obstante, hoy por hoy, estamos aún lejos de completar este proyecto porque muchas leyes deben armonizarse.

El principal objeto que tiene la unión de los mercados de capitales es conceder tanto a fondos de pensiones privados, como compañías de seguros y otros inversores a largo plazo la posibilidad de invertir en capital riesgo y en mercados de renta variable y, como hemos comentado, reducir la fuerte dependencia de los préstamos bancarios para la financiación de las empresas.

El mercado único debe resolver algunos problemas de los actuales mercados nacionales. En comparación con los Estados Unidos, el coste del acceso a los mercados de capitales en Europa es elevado, especialmente para las pequeñas y medianas empresas. Por eso muchos inversores se limitan a los mercados nacionales.

También te puede gustar

Portada de El Blog Salmón

Ver todos los comentarios en https://www.elblogsalmon.com

VER 2 Comentarios