Deutsche Bank
Por eso que el informe publicado este fin de semana por Viral Acharya y Sascha Steffen, pone este tema bajo el microscopio y defiende una exigencia de reservas del 7 por ciento, tal como lo estipulan las normas internacionales de Basilea III, aunque el Reino Unido exige niveles aún más elevados que permitan a la banca superar huracanes sistémicos como los desatados tras la crisis de 2008 sin obligar al rescate de los gobiernos y los contribuyentes.
Si se impone en la zona euro la exigencia del 7 por ciento de reservas a la banca (un tope de apalancamiento de 14,3), los bancos investigados requerirán capital por 767 mil millones de euros (ver Tabla), para poder soportar nuevas tormentas en el sistema financiero. Esto indica que si la situación empeora no se descartan nuevos rescates de los gobiernos a la banca, lo que puede obligar a nuevos ajustes y recortes presupuestarios en momentos en que la economía aún no supera el impacto de la crisis que estalló hace seis años. El Estudio realizado por Sascha Steffen, de la Escuela Europea de Administración y Tecnología (ESMT) de Berlín, y su colega de la Universidad de Nueva York, Viral Acharya, somete a unas rigurosas pruebas de estrés a gran parte de la banca europea, cuyos resultados se resumen en esta tabla:
Bombas de tiempo en Francia y Alemania
Como hemos señalado en otros artículos, la banca se encuentra artificialmente a flote gracias al apoyo de los gobiernos y el respiradero que facilita el Banco Central Europeo. El sistema colapsó tras el estallido de la crisis producto de los masivos niveles de apalancamiento que se generaron en los momentos de la euforia del crédito. Y como los líderes europeos centraron su atención en los problemas de la periferia (Grecia, España, Portugal), no fueron capaces de ver las bombas de tiempo ocultas en Francia y Alemania, cuyo sistema financiero aún requiere más de medio billón de euros en ayudas de sus gobiernos y los contribuyentes.
La situación de la banca italiana también es delicada y no se descarta que muchos bancos de la península sean nacionalizados, lo que encendería nuevamente el ventilador de la crisis del euro confirmando lo dicho por Joseph Stiglitz de que "el euro ha sido un error y los líderes europeos no han sabido encontrar una salida".
El informe de Steffen y Acharya señala también que numerosos bancos débiles de Chipre, Bélgica y España se enfrentan a problemas de capital y deberán solicitar ayudas de los gobiernos. En Italia pena la situación del Monte dei Paschi di Siena, uno de los principales candidatos a la quiebra, aunque defendido de las garras de la banca foránea por sus principales (y miles) de pequeños accionistas. Este banco ha tenido en los últimos dos años casi 8 mil millones de euros en pérdidas y requiere una inyección de capital de 3 mil millones de euros.
En El Blog Salmón | Colapsa la banca mundial y el sistema se va a pique antes de lo previsto, Por cuánto tiempo pueden el BCE y la Fed seguir apuntalando al actual sistema financiero? Imagen | dustpuppy