Nueva Rumasa: segunda emisión de pagarés


Nueva Rumasa le ha tomado el gusto a financiarse mediante la emisión de pagarés y se lanza a por la segunda emisión. La primera ha tardado en cerrarla unos seis meses, aunque no se sabe el importe exacto de pagarés emitidos por la compañía, se ha calificado por el grupo empresarial como un verdadero éxito.

Ahora se lanzan a por la segunda emisión de pagarés, bajando el interés ofrecido en la emisión, bajan del 8% al 6% anual. Este 6% se puede mejorar medio punto por cada año adicional que se le dé al pagaré con un límite de cinco años para llegar al 8%. Me asaltan varias dudas con tanta emisión de pagarés, sobre todo por el destino de los fondos.

Estas operaciones de financiación se realizan para adquirir empresas, según dice la propia compañía, con lo cual, se supone que las propias empresas adquiridas deben sufragar su coste con los beneficios teóricos que obtengan. Este punto es difícil de conseguir, porque en el caso de las emisiones a un año, ninguna empresa genera un beneficio del 108% sobre su valor de venta, y en el caso de financiación a 5 años, hablamos de beneficios que rondan el 28% después de impuestos.

En los sectores en los que estamos hablando, conseguir esos márgenes es una utopía y si alguna empresa los consigue, dudo mucho que tenga colocado el cartel de “Se Vende”. Las opciones más lógicas para financiar la adquisición de empresas no es la emisión de pagarés. Normalmente se recurre a capital riesgo, ampliaciones de capital y operaciones sustentadas sobre los fondos propios de las empresas resultantes. Si se recurre a deuda a largo, se realiza mediante la emisión de bonos u obligaciones, pero ahí si entra la CNMV con su labor de supervisión.

Por último, comenzar a realizar series de emisiones de pagarés sin control alguno, sin saber exactamente las cantidades en circulación ni los programas de recompra de los mismos, induce a pensar que se puede llegar a formar una gigantesca bola pagarés pelota, al igual que ocurre con muchas empresas con el papel de colusión. La gran diferencia estriba en que las pymes tienen como tope los importes de las líneas de descuento y la agudeza del banco que descuenta el papel, en este caso, se cuentan con pocas garantías para comprobar realmente qué ocurre con estas segundas y futuras emisiones de pagarés, que estoy seguro que seguirán saliendo.

Como siempre, a la hora de invertir, cada uno tiene que ser consecuente de los riesgos que corren sus inversiones pero hay que ser consciente que invertir en pagarés nominativos no a la orden de una empresa que están avalados por otra empresa del mismo grupo empresarial puede tener unos riesgos importantes, en el caso de problemas de resultados en el grupo.

En El Blog Salmón | Nueva Rumasa y la CNMV ¿qué está pasando?, La emisión de pagarés de Nueva Rumasa y Precisiones sobre la emisión de pagarés de Nueva Rumasa

También te puede gustar

Portada de El Blog Salmón

Ver todos los comentarios en https://www.elblogsalmon.com

VER 7 Comentarios