El Gobierno ha aprobado hoy el proyecto de ley sobre la reforma de la Seguridad Social, cuya principal novedad es que aumenta de 12,5 a 15 el número de años cotizados mínimos para tener derecho a pensión. Además endurece los requisitos necesarios para acogerse a la jubilación parcial, que sólo estará disponible para los mayores de 60 años. La reforma ahora tendrá que pasar por trámite parlamentario, aunque surge de un gran consenso entre Gobierno, sindicatos y patronal.
Además de lo dicho se han aprobado incentivos para que los trabajadores que quieran seguir trabajando después de los 65 años, mediante incrementos en su pensión una vez que se jubilen definitivamente. También se ha ampliado la pensión de viudedad, que ahora acogerá también a las parejas de hecho.
Toda una batería de reformas que seguro que son insuficientes para la crisis del sistema público de pensiones que se avecina cuando se jubile el baby boom de los años 50-70. Por mucho que se haga ahora, por mucho dinero que se ponga en el fondo de pensiones, el sistema será deficitario, y habrá que soportar el temporal con deuda, con financiación vía impuestos y/o con peores prestaciones a la gente jubilada. Esta reforma actual va encaminada a no ser tan generosos (aumentando el período de cotización mínimo) y las sucesivas irán por el mismo camino. También se aprobará en el futuro que la edad de jubilación sea mayor, como están haciendo otros países de Europa y que para el cálculo de la pensión se tenga en cuenta toda la vida laboral. Tendremos que ir viendo por dónde van los tiros en Europa, ya su baby boom es anterior (acabó 10 años antes que en España).
Vía | El País En El Blog Salmón | Reforma de las pensiones: más de lo mismo