Onésimo Alvarez-Moro
Para los que están o pueden estar en situación de ser nombrado a un puesto de mando, esta información puede ser útil. Gestionar equipos no es nada fácil y, si has entrado y el equipo ya existe, es aún más difícil.
Los problemas potenciales que se encontrarán estos nuevos jefes son:
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Aislamiento.
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Entrar como si siempre tienen la respuesta.
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Quedándose demasiado tiempo con el equipo que se encuentra.
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Intentando hacer demasiado.
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Ser asesorados o influidos por la gente incorrecta.
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Fijando expectactivas poco realistas.
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No construir coaliciones.
Las soluciones que nos dan para mitigar cada uno de estos problemas en orden son:
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No te encierres en tu despacho, visita mucho y habla con mucha gente.
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Preguntar mucho y estar abierto a escuchar lo que se responde.
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Aunque se entiende que hay que dar una oportunidad al equipo que se encuentra, fijar un tiempo para averiguarlo y actuar.
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El problema es que no se ha fijado prioridades claras, para uno mismo y para el equipo.
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Mantener líneas de comunicación abiertas con todos.
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La comunicación con los jefes para manejar sus expectativas permitirá ser más realista fijando expectativas para el equipo.
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Se debe estar abierto a todos.
Vía | CNN (en inglés) En El Blog Salmón | Los jefes siguen dando guerra y ¿Es tu jefe un pesado?
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