Estamos muy acostumbrados a valorar desde el punto de vista financiero cosas tales como el riesgo de nuestra inversiones o la rentabilidad de las mismas, pero en muchas ocasiones pasamos por alto una palabra que también puede ayudarnos a valorar la evolución de nuestra cartera como es la palabra performance.
En general cuando en un mercado se hace referencia a la performance de una cartera o de algunos títulos es por que se intenta valorar o analizar los resultados reales que hemos obtenido, aunque por analogía y en mercados internacionales se conmuta la propia performance como el resultado de la inversión. En un principio, con este termino podríamos tener cierta confusión, la forma de no tenerla es consiguiendo que sea para nosotros una palabra que denomine en cierta medida el valor real de nuestro resultado pero gracias a la estructura o composición del mismo.
La idea actual es de la conseguir que esta composición sea la forma más correcta de expresar los resultados financieros, ya que como bien sabemos, es muy complicado definir en ciertos momento las rentabilidades de algunos activos con un simple número expresando el porcentaje de beneficio o pérdidas que hemos obtenido.
En definitiva cabría plantear que la perfomance de un activo o cartera es la expresión más importante del mismo, ya que es capaz de indicarnos no sólo el resultado final de la inversión, sino también, todos y cada uno de los aspectos cuantitativos y cualitativos que marcan la realidad evolutiva desde un momento anterior hasta la situación actual en donde hacemos balance financiero de determinada inversión.
Ni que decir tiene que los valores fundamentales que conforman la performance de un activo son los mismos que tenemos en cuenta en muchas ocasiones de forma normal por separado, nosotros ahora le daremos un valor en conjunto. Hablamos de rentabilidad, riesgo, precio o precios contables y de mercado sin olvidar el horizonte temporal así como las situaciones influyentes acaecidas durante el mismo.
Por último hay que decir que la perfomance financiera es indiscutiblemente algo a tener en cuenta en la actualidad, ya que es evidente que aunque consigamos algo de rentabilidad tendríamos que tener el cuenta el factor riesgo que hemos asumido para conseguirlo; pero esto en definitiva reforzaría la idea de la teoría de carteras.
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