Agarraos que vienen curvas. El ministro de Economía, Luis de Guindos, se encuentra reunido en Bruselas con el Eurogrupo para tratar el rescate griego. Sin embargo, ha dedicado unos minutos para atender a la prensa antes de que comenzara el encuentro. Ante las preguntas sobre la reforma laboral que aprobará el Gobierno mañana, De Guindos ha manifestado que irán “a la raíz de los problemas del mercado laboral español”, muy en la línea del secretismo que rodea cualquier decisión del equipo de gobierno de Mariano Rajoy.
Poco después, sin ser consciente de que estaba siendo grabado, las cámaras han captado una conversación de De Guindos con Olli Rehn, el comisario de Asuntos Económicos, en la que el ministro aseguraba: “Mañana aprobamos la reforma del mercado laboral y va a ser que será extremadamente agresiva, con mucha flexibilidad en la negociación colectiva y reducimos la indemnización por despido“.
No es la primera vez que los micrófonos captan palabras indiscretas de los miembros del Gobierno del PP. Todos recordamos como hace unos días Mariano Rajoy era grabado en una charla informal con su homólogo finlandés, Jirki Katainen, asegurando que “temía una huelga general por los cambios laborales”.
Ante este panorama no podemos sino abrocharnos el cinturón y esperar a que mañana el Gobierno explique públicamente la nueva reforma, que sin duda traerá cola. Sólo entonces podremos abrir el debate sobre si la segura flexibilización del mercado laboral conseguirá reflotar la maltrecha economía española.
Vía | El Economista
En El Blog Salmón | Reforma laboral: el modelo Austríaco vuelve a escena