El otro de los fundadores de la empresa informática, Microsoft, acaba de anunciar que donará gran parte de su riqueza, en este caso, cuando fallezca.
Hemos visto al fundador y anterior presidente de Microsoft, Bill Gates III, dejar su puesto en esa empresa para dedicar su tiempo a la fundación que estableció unos años antes, the Bill and Melinda Gates Foundation, la fundación más rica del mundo.
Esta fundación, no sólo gestiona y gasta los miles de millones que Bill Gates depositó en sus arcas, pero como a su amigo, Warren Buffett, le gustó lo que estaban haciendo con tantos millones, el también dijo que donaría gran parte de sus miles de millones de forma progresiva, empezando inmediatamente con $5.000 millones.
Siendo dos de las tres personas más ricas del mundo, esta fundación manejará el equivalente al PIB de algunos países, y más que el PIB de muchos.
Ahora el socio original de Bill Gates en Microsoft, Paul Allen, anuncia que donará gran parte de lo que tiene a su fundación. Tiene mucho menos, $13.500 millones, pero se fue de Microsoft mucho antes y algo es algo.
Supongo que se dan cuenta de que no necesitan todo lo que tienen o piensan que sus nombres vivirán más, después de que se retiren de la vida. Puede que, con los años, se dan cuenta que otros lo tienen mucho peor o se convierten en buena gente, si no lo eran antes. Está claro que los cánceres sufridos por Paul Allen le han convencido donde dirigir parte de su fortuna.
Sea la razón que sea que estos ricos deciden establecer estas fundaciones y ayudar al mundo, es muy bienvenido. ¿Qué os parece, por qué toman este paso algunos ricos?
Vía | BBC News (en inglés)
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