Hace unos días, vicepresidenta de la Comisión Europea (CE) y comisionada de Justicia, Derechos Fundamentales y Ciudadanía anunció una iniciativa que busca aumentar el porcentaje de presencia de las mujeres en los puestos de consejo no directivo en las empresas europeas a un mínimo del 40%. Como vemos en la tabla, los países europeos son muy modernos pero sólo los escandinavos están demostrando avances reales en eso de igualdad entre mujeres y hombres en los consejos de administración de las empresas, los únicos que acompañan los objetivos con penas reales.
El problema es que, tres semanas después de que lanzó sus ideas que prometían, ya que seguían el modelo noruego, llegaron las críticas. Políticos siendo políticos, no necesitan recibir muchas críticas para cambiar de rumbo y, aunque el objetivo sigue siendo el mismo, el grueso de sus nuevas propuestas son más recomendaciones que exigencias y las multas serán casi imposibles de aplicar.
Los principales elementos de su propuesta son los siguientes:
- En los consejos de administración de las empresas cotizadas en las bolsas europeas, la Directiva establecerá un objetivo mínimo del 40% en 2020 para los miembros del género menos representado en los Consejos para los puestos de consejero no ejecutivos, o 2018 para las empresas cotizadas con representación pública.
- La propuesta también incluye, como medida complementaria, una “cuota flexible”: la obligación de que las empresas cotizadas establezcan objetivos con respecto a la representación de ambos géneros en los consejos de dirección que deben cumplirse en 2020 (o 2018 en el caso de las empresas públicas). Las empresas tendrán que informar anualmente sobre los progresos alcanzados.
- Las características de selección de los consejeros seguirán siendo las cualificaciones y los méritos como los criterios objetivos. Se establecerán medidas de protección para asegurar que los procesos de selección siguen los criterios independientes y no priman al género con menos representación, como exigen las decisiones del Tribunal Europeo de Justicia. Los Estados miembros son libres de adoptar medidas que van más allá del sistema propuesto.
- Los Estados miembros deberán establecer sanciones adecuadas y disuasorias a las empresas que incumplen la Directiva.
- La subsidiariedad y la proporcionalidad de la propuesta está desmostrada con varias condiciones de flexibilidad:
- El objetivo del 40% se aplicará a las empresas que cotizan en bolsa, debido a su importancia económica y de alta visibilidad.
- La propuesta no se aplicará a las pequeñas y medianas empresas.
- El objetivo del 40% se concentra en puestos de directores no ejecutivos.
- En consonancia con los principios de mejora de la legislación, la Directiva es una medida temporal y está previsto que expire en 2028.
Las empresas, como muchos de los comentaristas cuando escribo sobre estos temas, piden más tiempo y más libertad para cumplir. Como las mujeres están en el mercado de trabajo durante décadas, las empresas han tenido décadas para demostrar que quieren dejar de discriminar contra las mujeres.
Además, hablando de los consejos de administración, no vale el argumento que recibo de algunos comentaristas de que las mujeres son distintas y no pueden cargar con tanto peso como los hombres, haciéndoles incapaces de hacer el mismo trabajo . Ahora los informes no se tienen que cargar, que se pueden transportar de forma digital, y supongo que esto será suficiente para los que piensan que cargar peso es motivo aceptable para discriminar.
Aunque esta nueva Directiva suaviza, por lo menos continúa el intento de ir en la dirección de la no discriminación. A ver si ayuda a que se enteren los que niegan que esta discriminación existe. ¡No hay que ver la discriminación en cada acto, se ve claramente en los resultados!
Vía | EuroActive, BBC News & Spiegel (en inglés)
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