Los Productos Cotizados tienen un gran poder transformador de tus inversiones. En parte, ello es debido a sus propias características flexibles que ofrecen soluciones reales a posibles eventos de todo tipo. Además, el aprendizaje que aportan es otra gran llave para el cambio beneficioso.
Puede decirse que comenzar a tener Productos Cotizados en tu cartera es —al menos, debe ser— una toma de responsabilidad. Es como disponer de una gran caja de herramientas que debe ayudarte a complementar tus inversiones y a rellenar los huecos que necesita tu estrategia para ser robusta y coherente.
¿Qué es un Producto Cotizado?
Son un tipo de instrumentos financieros que se negocian en un mercado organizado, aunque también pueden ser comprados o vendidos fuera de la Bolsa. Por ejemplo, los Productos Cotizados de Société Générale pueden adquirirse o transmitirse en la Bolsa, pero se intercambian, principalmente fuera de ella, de 8.00 a 22.00 h., de lunes a viernes, a través de Renta4, Trade Republic y DEGIRO, lo cual ahorra comisiones.
En general, se trata de derivados cuya evolución está ligada a la de un activo subyacente de acuerdo con unas condiciones prefijadas. Eso permite gestionar los riesgos, la rentabilidad y la liquidez de estas inversiones de maneras que no serían posibles invirtiendo solamente en el activo subyacente.
También los caracteriza su enorme flexibilidad. De hecho, existen Productos Cotizados basados en el comportamiento de acciones, tipos de interés y de cambio, instrumentos de renta fija, materias primas, índices, criptodivisas, etcétera. Y, dependiendo de las características con las que hayan sido diseñados, su movimiento puede estar ligado al del subyacente de muchas formas distintas.
Productos Cotizados apalancados y de inversión
En principio, conviene hacer una diferenciación en dos categorías:
- Los Productos Cotizados apalancados incrementan la exposición a las variaciones de la cotización del subyacente. Así, es posible que, ante subidas o bajadas en un determinado porcentaje, la ganancia o pérdida que se acumule sea considerablemente mayor.
- Los Productos Cotizados de inversión son menos arriesgados que los apalancados, ya que no tienen apalancamiento. Son alternativas para quienes buscan un perfil de reembolso y riesgo muy especifico sobre un activo.
¿Cuáles son los principales tipos de Productos Cotizados?
Dada su flexibilidad, pueden diseñarse tipos de Productos Cotizados con diferentes características. Destacan los siguientes:
- Warrants clásicos, que permiten tener la posibilidad —no la obligación— de comprar (warrants call) o vender (warrants put) un activo subyacente a un precio fijado de antemano (precio de ejercicio o strike).
- Multis, que mantienen un apalancamiento constante diario. Por ejemplo, si el subyacente sube un 1 %, el multi X5 alcista tendrá un incremento del 5 %. Si por el contrario una jornada baja un 1 %, ese mismo multi perderá un 5 %.
- Turbos, que están diseñados para replicar los movimientos del subyacente con una inversión mucho menor —con financiación—, lo que incrementa sus riesgos y las oportunidades de ganancia. Además, pierden su valor si la cotización del subyacente alcanza una barrera (evento de knockout).
- Inline, que ofrecen la oportunidad de cobrar un importe fijado de antemano si la cotización del subyacente se mueve dentro de un determinado margen. Por contra, pierden su valor si esa cotización alcanza el límite superior o el inferior.
- Los certificados tracker pretenden replicar la evolución de la cotización del subyacente sin necesidad de invertir directamente en él, lo cual resulta interesante porque permiten acceder de forma sencilla a activos a los que normalmente es difícil llegar, como el hidrógeno o el oro.
- El bono convertible inverso —RCB, por sus siglas en inglés— obliga a la conversión en acciones si se dan determinadas condiciones, que serán, normalmente, desfavorables. A cambio, suele ofrecer cupones atractivos.
- Los certificados de capital protegido ofrecen la garantía de recuperar total o parcialmente el capital invertido al vencimiento, al tiempo que permiten beneficiarse —en mayor o menor medida— de la evolución del subyacente.
- Bonus warrant, que incorpora tanto un bono como un warrant put. De este modo, puedes obtener beneficios de su ejercicio siempre que la cotización del subyacente sea suficientemente elevada.
¿Cómo podría haber cambiado tu inversión si hubieras utilizado Productos Cotizados en Apple, Tesla o el IBEX en los últimos años?
Si miras las cotizaciones de los últimos años de Apple, Tesla o el IBEX, verás perfiles diferentes:
- Apple ha tenido una tendencia continuada a la subida de cotización siguiendo una tendencia de largo plazo. No obstante, ha tenido ciertos altibajos. Por ejemplo, en el primer trimestre de 2025 comenzó por encima de 240 dólares y terminó por debajo de los 210.
- Tesla ha tenido movimientos bastante amplios, en uno y otro sentido. De hecho, al cierre del primer semestre de 2025, su cotización se situaba en niveles parecidos a los del cierre de 2021. Entre medias, ha habido varios episodios de grandes subidas y bajadas.
- El IBEX35 tocó sus máximos históricos en 2007. Desde entonces, ha tenido una bajada importante, un largo período lateral pero con altibajos y, desde finales de 2020, una aproximación progresiva a los máximos históricos.
Son tres casos de subyacentes donde, con distintas circunstancias, puedes realizar operaciones con Productos Cotizados. Pongamos algunos ejemplos:
- Con Apple, podrías haber utilizado, por ejemplo, warrants como cobertura en aquellos períodos en los que se estaba atento a noticias que podían provocar altibajos.
- Tesla es un buen ejemplo de que existen subyacentes muy interesantes para realizar operaciones con Productos Cotizados apalancados. Buscarías multiplicar los potenciales beneficios de anticipar un escenario tanto alcista como bajista. No obstante, a pesar de que se puede ganar mucho dinero, también se puede perder toda la inversión si se toman decisiones equivocadas.
- Con el IBEX35, vemos cómo, a lo largo de los años, el comportamiento ha ido cambiando. Por tanto, podrías haber ido cambiando el enfoque con el tiempo: momentos orientados a la cobertura, al apalancamiento con estrategias alcistas y bajistas…

Comparativa de Productos Cotizados
En la siguiente tabla, puedes observar el perfil de cada uno de los principales tipos de Productos Cotizados: su relación entre rentabilidad y riesgo y cuáles son las necesidades que pretende cubrir y los beneficios que podría reportarte.
riesgo y rentabilidad |
PRODUCTO |
necesidad del inversor |
beneficio clave |
---|---|---|---|
BAJO RIESGO/ BAJA RENTABILIDAD |
Certificado Capital Protegido |
Preservar patrimonio y aprovechar subidas de mercado |
Recuperar el capital invertido con potencial de rentabilidades superiores |
RIESGO MODERADO/ RENTABILIDAD MODERADA |
Reverse Convertible (Bono) |
Generar ingresos periódicos con riesgo acotado |
Cupones atractivos sin depender del rendimiento del subyacente |
|
Bonus Warrant |
Obtener una rentabilidad atractiva con protección condicional |
Pago mínimo (bonus) al vencimiento si el subyacente no cae por debajo de un nivel predeterminado |
|
Certificado Tracker |
Participar de manera simple en mercados o sectores |
Replica 1:1 el comportamiento del índice o activo subyacente |
ALTO RIESGO/ ALTO POTENCIAL DE RENTABILIDAD |
Warrant (tradicional) |
Construirse estrategias de inversión con apalancamiento |
Multiplicar ganancias con poca inversión inicial o protegerse contra bajadas del mercado |
|
Turbo |
Operativa apalancada sobre el subyacente con relación casi directa |
Apalancamiento eficiente, seguimiento casi 1:1 del subyacente, con barrera de knockout |
|
Inline |
Generar retornos si el mercado se mueve dentro de un rango |
Rentabilidad significativa si el subyacente permanece en unos niveles determinados |
|
Multi |
Exposición con apalancamiento constante diario |
Apalancamiento es ajustado diariamente a su nivel predeterminado (apalancamiento diario constante) |
La clave: entender bien el Producto Cotizado
De lo que hemos comentado hasta ahora se extrae una conclusión clara: los Productos Cotizados pueden emplearse con fines muy diversos y su comportamiento es muy variable en función del escenario que se materialice.
Por ello, es fundamental entender la documentación del Producto Cotizado. En especial, destacan el documento de datos clave —KID, por sus siglas en inglés—, el folleto base y las condiciones finales. Ello exige una lectura detenida y comprensiva que no te deje con dudas. Si las albergas, lo mejor es que contactes con expertos o recurras a herramientas basadas en inteligencia artificial como Warren.
Además, hay otra capa fundamental de conocimiento: necesitas estar al tanto del contexto financiero general y de todo lo que afecta al activo subyacente. Esto es especialmente importante en un mundo, como el de los Productos Cotizados, en el que es muy frecuente la operativa en plazos cortos.
En tercer lugar, conviene tener una visión estratégica. Has de prever distintos escenarios y debes valorar cuál debe ser tu criterio de decisión. Solo así podrás emplear los Productos Cotizados de forma coherente con todo tu perfil financiero.
Como resultado, si sumas el conocimiento del Producto Cotizado, el seguimiento del subyacente y del entorno general y la visión estratégica, habrás alcanzado un elevado grado de entendimiento, lo que te permitirá llevar a cabo inversiones financieras realmente interesantes.
La inversión en Productos Cotizados requiere una vigilancia constante de la posición. Los Productos Cotizados comportan un alto riesgo si no se gestionan adecuadamente. Existe la posibilidad de que el inversor pierda la totalidad de su inversión. Antes de invertir, los inversores deben consultar el KID, el Folleto Base y las Condiciones Finales del producto disponibles en https://bolsa.societegenerale.es/.
Imágenes y materiales | Société Générale
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