Una de las peores experiencias de todo estudiante Erasmus hasta hace unos años: esperar durante días a que el dinero transferido desde España llegase a su cuenta italiana, belga o finlandesa. Las transferencias bancarias internacionales siempre han sido problemáticas: comisiones de servicio abusivas, tasas de cambio desfavorables, largos periodos de liquidación... un auténtico quebradero de cabeza.
Las regulaciones comunitarias y, sobre todo, la creación del Euro han simplificado bastante el proceso dentro de Europa. La moneda única elimina el problema de las tasas de cambio. La zona única de pagos en euos (SEPA) armoniza los sistemas de pagos de todos los países miembros, reduciendo drásticamente los costes y tiempos de las transferencias bancarias continentales. El sistema TARGET2 permite liquidaciones instantáneas de grandes volúmenes entre bancos de la Eurozona, haciendo posible que las transferencias lleguen al cliente final incluso en el mismo día.
El Banco Central Europeo ha decidido ir un paso más allá. A finales de 2018 los pagos dentro de la Eurozona serán instantáneos, gracias al sistema TIPS (TARGET instant payment settlement). El servicio estará a disposición de ciudadanos y empresas 24 horas al día, 365 días al año. ¿Qué es exactamente y cómo funciona el TIPS?