El coronavirus empezó en el mayor productor mundial de productos y añadió dificultad para los exportadores españoles, que llevan sorteando las trabas que ponen en el comercio Estados Unidos y China.
A parte de lo que haya provocado el coronavirus en China, la declaración del estado de alarma sanitaria en España ha producido la histeria de comprar papel higiénico, agua, lácteos, carnes, pan, frutas, verduras… pero estas colas no sirven de mucho cuando los supermercados tienen en sus almacenes los productos de primera necesidad para varios meses.
Las exportaciones chinas se han reducido más del 15% en 2020
Las exportaciones que desde hace años han sido el motor económico de muchas economías, pero en los últimos años se ha ido desinflando. El coronavirus ha sido un golpe más a las exportaciones y no se pudo iniciar en peor momento.
Las exportaciones de China se han reducido los dos primeros meses del año, cuando las autoridades del gigante asiático ordenaron cerrar parte de las fábricas y restringieron los viajes internos y externos para intentar contener el brote de coronavirus.
La cadena de suministro mundial, debemos considerar que China es la segunda mayor economía del planeta, permanece parcialmente paralizada y su actividad comercial continúa a medio gas.
Durante estos primeros meses, las exportaciones chinas se han reducido un 15,9 por ciento interanual hasta los 260,73 mil millones de euros, mientras que las importaciones se han reducido un 2,4 por ciento hasta los 265,84 mil millones de euros.
Esto datos arrojan un déficit comercial de más de 5 mil millones de euros. En el mismo periodo del 2019 se registró un superávit de 37,5 mil millones de euros. El comercio exterior total cayó un 9,6 por ciento.
Las exportaciones más perjudicadas son los bienes alimentarios de España a China
El año pasado las exportaciones a nivel mundial crecieron un 1,8 por ciento, hasta llegar a los 290 mil millones de euros, frente al crecimiento del 3,3 por ciento de 2018 y el 7,7 por ciento de 2017.
Entre los mercados que tuvieron un mayor crecimiento en 2019 fueron Corea del Sur, con un 12 por ciento, el tercer país más afectado por el coronavirus, con más de 7.000 casos.
Si las economías del sureste asiático llegaran a tener recesión, los exportadores se quedarían sin recursos ante el parón que se ha producido en China, epicentro de la crisis del coronavirus.
Es pronto todavía para cuantificar las consecuencias de los efectos del coronavirus que ha ocasionado a las exportaciones. Aunque hay empresas españolas que se han visto favorecidas por la reducción de la producción en China.
Las exportaciones españolas a China ha aumentado durante estos últimos años. Durante el 2018 hubo un aumento del 5,5 por ciento y durante el año pasado hubo un aumento de exportaciones del 8,3 por ciento, cuando se alcanzó un volumen de 14,6 mil millones de euros.
Los principales bienes de exportación a China son los alimentos. El parón del consumo en China podría afectar negativamente a las empresas del sector alimentario mientras tenga la duración de la crisis por el coronavirus, pero seguramente que después habrá un recuperación del consumo.
Las exportaciones más perjudicadas son los bienes alimentarios de España a Corea del Sur
El otro gran afectado Corea del Sur tiene un tratado de libre comercio con la Unión Europea desde el 2011 que puede ayudar a las empresas con negocios en Corea del Sur. El acuerdo de libre comercio ha fortalecido las relaciones comerciales entre España y Corea del Sur.
Durante el año pasado, los flujos de comercio bilateral de mercancías fue de 5,38 mil millones de euros y 2,25 mil millones de euros correspondían a exportaciones españolas. Además, los despachos españoles han aumentado en Corea del Sur un 12,2 por ciento.
En la eventualidad de que el consumo en Corea del Sur llegara a retraerse a causa del coronavirus, podría verse reducida la exportación de bienes de consumo, es decir, afectaría también los productos alimentarios, que suponen 636 millones de euros anuales, un 28 por ciento de las ventas totales que se realizan a Corea del Sur.
¿Los supermercados se van a quedar vacíos en España?
Debemos diferenciar el colapso con el pánico al coronavirus en los supermercados y que estos se queden sin existencias por no tener más productos. Hemos visto durante estas últimas semanas los colapsos por largas colas de clientes que quieren de forma desesperada comprar ciertos productos de primera necesidad.
El pasado viernes se intensificó la imagen que se ha llevado repitiendo estas últimas semanas. Colas de media hora en las puertas de los supermercados, personas comprando compulsivamente productos precederos e incluso en algunos sitios se prohibía la entrada de más personas a causa de la aglomeración en el interior.
Pero esto este estado de alarma ha llevado a que la compra semanal se convierta en más de una carro, y simplemente por la sensación de pánico que se vive, ya que las medidas que se han tomado han desatado el pánico entre los ciudadanos españoles. Este pánico ha sido el efecto llamada para hacer la compra de forma compulsiva teniendo el estado de alarma sanitaria que les impide salir de casa.
Los supermercados afirman que tiene más clientes de lo habitual, y no hay estanterías vacías, salvo en caso de dificultad de reposición, y el día siguiente los clientes tendrán los productos habituales para que puedan comprar en las mismas estanterías vacías que habían el día anterior.
La sensación de pánico e histeria es real cuando se cruza la puerta de cualquier supermercado, ya que hay silencios tensos, estanterías vacías, colas para pagar en la cajas, carros llenos, nerviosismo entre la gente, trabajadores desbordados… Ciudadanos de cualquier edad compiten a ver quién se hace antes con un producto.
Debemos pensar que los productos que ahora mismo tienen más tiempo de entrega son las mascarillas y los geles desinfectantes de manos, pero ya se ha comentado por los medios y la campañas de televisión, hay que lavarse bien las manos y evitar estar más cerca de otra persona en 1 metro, pero esto lo podemos decir también para no contagiarnos de la gripe.
Por tanto, si salimos lo imprescindible para ir a trabajar, aquellos que no puedan hacer teletrabajo o estén cerrados por la alarma sanitaria, pasear el perro, ir a cuidar a nuestros ancianos, ir al cajero a sacar dinero o simplemente ir a la farmacia, no tendríamos que estar más contagiados que con una gripe.
Vemos a las cajeras de supermercados con guantes de látex como precaución, ya que son trabajadores que tocan constantemente dinero donde puede haber algún coronavirus, y a nuestra farmacéutico o farmacéutica con guantes y mascarilla, es por mera precaución, es molesto que cuando estén comprando alguien te tosa en la cara.
La psicosis y el miedo por el estado de alarma sanitaria es infundado
Da lo mismo ir a una gran superficie o un supermercado, a media tarde las estanterías donde se colocan los productos están vacías. Existe un miedo a quedarse desabastecidos y aislados en casa. Aunque se repitan los mensajes de calma que no están convenciendo a nadie, pero a lo mejor lo que pasa que el problema es que la comunicación falla.
Los responsables de las grandes cadenas de supermercados han salido por los medios de comunicación garantizando que los supermercados no se van a quedar sin productos, es decir, desabastecidos. Un dato relevante para las preocupaciones de los ciudadanos españoles ante la alarma sanitaria por el coronavirus.
Los compradores ansiosos por hacer llenar sus despensas de pasta, arroz, aceite, leche o papel higiénico se han visto por toda España durante estos últimos días desde primera hora de la mañana. Parece que todo el mundo quiere anticiparse, sin demasiado sentido, a que, les fuera más difícil hacer la compra o les falta algún producto.
En El Blog Salmón | El coronavirus afecta al bolsillo de los españoles
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