La realidad es bien distinta según seas un ciudadano de a pie o según seas Hacienda. Para el primero, el encarecimiento del coste de vida es palpable en casi todos los aspectos del día a día: desde la vivienda hasta la compra de los productos más básicos. De hecho, muchas familias no paran de ajustar sus presupuestos y se enfrentan a gastos cada vez más y más elevados.
Mientras que para el...